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viernes, 10 de enero de 2020

ROSA CORTÉS. POR LA REPARACIÓN HISTÓRICA DEL PUEBLO GITANO


Rosa Cortés nació en Vélez Rubio (Almería), aproximadamente por el año 1726. Contaba por tanto unos 23 años de edad cuando fue capturada con ocasión de la redada de 1749.  Estaba casada por entonces con Ginés Fernández, a quien por las directrices del marqués de la Ensenada se le destinó al arsenal de La Carraca, siendo probablemente uno de los dos centenares de gitanos, que en enero de 1752 fallecieron en el trayecto entre aquel arsenal y el de El Ferrol (La Coruña), ya que al año siguiente, Rosa declaró que se hallaba ya viuda.
Su calvario comenzó nada más ser trasladada desde su pueblo hasta Almería, donde quedó recluida en la alcazaba de Almería. Una vez reunidas las mujeres y niños menores de siete años de toda la jurisdicción de esta ciudad, fue enviada  a Málaga por haber dispuesto Ensenada crear en ella, lo que denominó “depósito” de mujeres, un lugar de concentración en el que debían esperar las gitanas a que se les diera un destino definitivo.


Durante dos largos años y medio, Rosa y sus compañeras de cautiverio fueron pasando por diferentes puntos de Málaga, todos ellos inadecuados para concentrar a más del millar de personas que llegó a albergar, ni la alcazaba ni los barrios como El Perchel, pudieron asegurar una estancia cómoda, como tampoco una seguridad que evitara sus continuos intentos de fuga. Finalmente, ante las quejas del intendente y del ayuntamiento malacitano, el ministro acabó disponiendo el 8 de julio de 1752, el traslado de todas las mujeres que aún se hallaban en los depósitos de Palencia y Málaga, a la Casa de Misericordia de Zaragoza, en donde les aguardaban otros dos centenares de mujeres y niños (se hallaban en ella desde primero de mayo de ese año).
Dada la orden de embarcar a las 553 mujeres que subsistían en Málaga, el 18 de agosto, comenzó la singladura sobre tres buques en dirección a los Alfaques de Tortosa, a donde arribaron los días 22 y 23 de ese mes, y en donde hubieron de esperar la llegada de la tropa que debía custodiarlas en su camino a la capital aragonesa. El 7 de septiembre se emprendió el camino remontando el río Ebro hasta el Salto de Cherta, desde el cual prosiguieron la marcha a pie y en carretas hasta Zaragoza.
Nada más llegar el 13 de septiembre a la Casa de Misericordia, las mujeres dieron muestra de su resolución y se negaron a entrar en ella, reclamando permanecer en el patio. A esta muestra de rebeldía le sucederían otras muchas dentro de una estrategia de resistencia, por la que se pretendía hacer costosa e insoportable su permanencia, tanto para los regidores como para las arcas del Estado.
Los actos de sabotaje a la infraestructura de la Casa e intentos de fuga, al margen de los destrozos deliberados en ropa, vajilla y mobiliario, fueron frecuentes. Uno de ellos, en el que más de medio centenar de mujeres logró evadirse la noche del 12 de enero de 1753 (casi todas fueron capturas al poco tiempo), tuvo a Rosa Cortés como cabecilla de la intentona. Su plan era sencillo, abrir un boquete en la pared de la sala que servía como dormitorio y que daba a la calle, lo suficientemente grande como para poder traspasarlo. Con toda la paciencia del mundo, durante las noches, cuando todos estaban durmiendo, apartaba el jergón sobre el que se acostaba y con sólo un clavo y agua, tal como ella misma declaró una vez que fue apresada:

“pudo haber y arrancar (los clavos) de unos maderos, y para hacerlo con más facilidad y brevedad, echaba agua en la pared, que es de tapia, y con esto se ablandaba la tierra y pudo hacer más prontamente dicho agujero y quebranto”

Aunque quiso asumir la responsabilidad de la acción, para que no fueran castigadas las demás mujeres, delató a tres compañeras que los regidores de la institución benéfica consideraban mujeres de confianza, las que entre otros cometidos cumplían tareas como las de hacer compras y recados en la ciudad, pero sobre todo, la de ejercer de celadoras “sobre las otras e hiciesen la visita de ella por la noche, antes de recogerse a dormir. Un cometido por el que las demás mujeres debieron tomarles cierta inquina. Posiblemente, detestadas por ello, Rosa las incriminó afirmando que las tres “fueron conscientes y cómplices” en la fuga.
Acto en el que se presentará la Plataforma
Esta es la última noticia que tenemos de Rosa Cortés. A partir del 31 de marzo de 1753 nada volvemos a saber de ella, pues no figura como actora en incidentes posteriores ni en ninguna de las licencias de libertad concedidas desde 1754. Caída en el olvido como el resto de sus compañeras de cautiverio, su nombre e historia han sido rescatados; y tomándola como representante de todas las víctimas del Proyecto de Exterminio emprendido entre 1749 y 1765, se ha constituido la “Plataforma Rosa Cortés” con la que reivindicar la necesaria y urgente reparación histórica del Pueblo Gitano.
M. Martínez

Para mayor información sobre los hechos históricos que vivió Rosa Cortés, ver: https://recyt.fecyt.es/index.php/Hyp/article/view/59925/41328

miércoles, 1 de agosto de 2018

REPARACIÓN HISTÓRICA: hoy salen del olvido las víctimas gitanas de la ciudad de Lleida

Lista de los gitanos avecindados en la ciudad de Lérida que se prendieron en la noche del día 24 de agosto del año 1749.

Pedro Malla, de edad de                                 56 años
Juana Malla, su mujer, de edad                      50
María Malla, doncella, hija                            16
Serafina Malla, doncella, hija                        18
Vicente Malla, hijo de                                    10
Antonio Malla, hijo de                                   18
Pedro Malla menor, de                                   19
Agustina Malla, mujer de Pedro Malla          14
                        -
Juana Gomis, viuda de Miguel Gomis, de     48
Ana Gomis, doncella, hija                              16
                        -
Félix Rodas, de edad de                                 24
Ana María Rodes, mujer de Félix                  18
Juana Rodes, hija                                             3
                        -
Pascual Gomis, de edad de                             40
Josefa Gomis, su mujer                                  30
Jaime Gomis, hijo de                                      1 ½
                        -
Raimunda, criada de Francisco Jiménez,
doncella, de edad de                                       50
Francisco Escudero, de edad de                     40


Palau de la Paería
COMENTARIO:
Retomamos las reparaciones históricas de las víctimas de las redadas realizadas a lo largo de los meses de julio y agosto de 1749. En este caso, de las familias que habitaban Lleida la noche del 24 de agosto.
Aunque en la mayor parte del territorio nacional la redada se desarrolló la noche del 30 de julio, en algunas poblaciones andaluzas; y sobre todo, en el con junto catalán, las órdenes de captura no llegaron, lugares en los que hubo de darse nuevas instrucciones para completar la operación.
Desde enero de 2015 (Zaragoza) en que los actos de homenaje se exteriorizaron, se han venido realizando diferentes reparaciones históricas en Pineda del mar, Alicante y Denia. En septiembre de este año le tocará el turno a Lleida por medio de la colocación de una placa en recuerdo de las víctimas, tanto de la ciudad como de la provincia.
No queremos terminar este pequeño comentario sin señalar los principales responsables de este genocidio en términos modernos, para lo que sugerimos la siguiente lectura: http://adonay55.blogspot.com/2018/08/instruccion-del-marques-de-la-ensenada.html
Fernando VI, Benedicto XIV, Vázquez de Tablada, Ensenada

viernes, 29 de diciembre de 2017

WIKIPEDIA Y EL PROYECTO DE EXTERMINIO DE LOS GITANOS ESPAÑOLES

Acaba el año y en Wikipedia sigue ausente la página dedicada al Proyecto de Exterminio de los gitanos españoles iniciado en 1749 con la redada de la noche del 30 de julio. Y ello, a pesar de que el 21 de junio de este año la construí a partir de mis trabajos de investigación, los de Antonio Gómez Alfaro y el de otros autores. Sin embargo, veinticuatro horas después ya había sido borrada por considerar que dicho artículo estaba duplicado, en lo cual disiento, por cuanto que la supuesta dúplica (Gran Redada) se basa principalmente en la operación de captura, en tanto el Proyecto de Exterminio va más allá de la Redada. Abarca más de quince años de encierro.

No destacar como se merece el Proyecto de Exterminio, minimiza el valor histórico del acontecimiento, pues éste engloba a la Gran Redada.

No profundizo en otras razones que puedan explicar esta decisión por parte de Wikipedia, ni el motivo por el que se borran aportaciones y se mantienen otras que son inexactas.Éste es un viejo problema que viene enfrentando a los historiadores en determinados temas históricos y políticos. Puede que la razón sea su concepción jerárquica, pero también el prácticamente inexistente canal de comunicación entre colaboradores y bibliotecarios.

miércoles, 13 de diciembre de 2017

LA RAMA PORTUGUESA DE LA GRAN REDADA DE 1749

As diligencias que se fizerao nesse reino por prender os ciganos obriga grande nº de les refugirem para a nossa parte, e ordenando SM se fizese aprehençao ne les onde quer que se achasem, ficao ja muitos nas cadeas das terras fronteiras. He o mesmo Sr. servido que V.E participe a esa corte esta noticia, e procure saber de la em qual das suas praças quer que se vao entregar as suas justiças os ditos ciganos espanhoes.

A pesar de la cuidada planificación y medios dispuestos para conseguir la gerenal aprehensión de los gitanos y gitanas españoles, un buen número de ellos consiguió eludir la captura. los más cercanos a la frontera portuguesa consiguieron cruzarla y refugiarse en el reino luso. Sin embargo, el Consejo de Castilla, que había logrado de la Santa Sede la autorización para extraer del sagrado a cuantos se refugiaran en los templos, también contó con la colaboración portuguesa con el mismo fin.
El 17 de septiembre de 1749 se ordenó al conde de Daydie y a don Luis de Porter, admitir "en las plazas de la frontera todos los gitanos que se remitan por las justicias o gobernadores de las de Portugal, respecto de haberse introducido en aquel reino huyendo de la providencia general dada contra ellos en esta".
Plaza fortificada de Badajoz. Uno de los lugares elegidos para recibir a los gitanos "portugueses" - Wikipedia
Como consecuencia de esta colaboración, las autoridades portuguesas aprovecharon para deshacerse de sus gitanos, por lo que fueron presos muchos de los que se hallaban asentados varios años atrás y enviados junto a los gitanos españoles que en primera instancia habían conseguido huir. Y, aunque los gobernadores de las plazas fronterizas a donde fueron remitidos advirtieron de este abuso, unos y otros compartieron la misma suerte.

viernes, 27 de octubre de 2017

LA FAMILIA JEREZANA DE LOS MONJE SOLICITA LA LIBERTAD DE SUS INTEGRANTES

Diego, Francisco, Juan y Diego Jiménez Monje, hijos y hermanos, por sí y en nombre de sus familias, todos vecinos de Jerez de la Frontera... exponen hallarse molestados y en prisión en fuerza de la orden general y resolución de V.M que sean expulsos de estos reinos todo género de gitanos, para que extinguiéndose se liberte la monarquía de los perjuicios continuos que semejante raza causaban.
Pero siendo V.M dueño absoluto de la ley, pues al plebeyo puede y hace noble, y a este grande, desde cuyo instante deja de ser lo que fue, y para gozar de la gracia que por su príncipe y señor se le concede, por lo que siempre que los suplicantes hagan constar palpablemente de no ser tales gitanos, así en esencia, como en costumbres, sino castellanos viejos, y por tales declarados por V.M esperan de superior protección y paternal amor, no deben ser comprendidos en la citada resolución, y en general como lo han merecido en las anteriores pragmáticas, providencias dadas hasta la presente, a cuyo fin hacen presente con la justificación que acompaña, que en el año de 1691 fueron declarados por vuestra Real Chancillería por castellanos viejos a los ascendientes de los replicantes, y a éstos en el de 717 por vuestro Real Consejo, y en el de 47 por aquella justicia mediante lo cual y lo que resulta de dicha justificación.

A V.M.
recurren, piden y suplican que precediendo los más exactos informes en atención de no ser tales gitanos, declarados castellanos viejos por vuestro Real Consejo, se sirva V.M mandar no sean comprendidos en la citada orden general, y que a este fin se dé la orden respectiva a aquel corregidor...

COMENTARIO:
Cadena de presos
Este documento se enmarca en el proceso abierto por la Real Orden de 28 de octubre de 1749, a fin de dar libertad a todos aquellos gitanos y gitanas capturados durante las redadas realizadas en el verano de ese año. Una disposición que vino a dar respuesta a las numerosas quejas y dudas que se suscitaron tras la prisión general.
Reunida la Junta de Gitanos bajo la supervisión de su confesor Francisco Rávago, se procedió a diseñar la forma en que los gitanos y gitanas debían justificar su libertad, así como los destinos que debían tener los que quedaran presos por “malos”. Un estudio que abrió un amplio debate respecto a la conveniencia de deportarlos a las Indias españolas, opción que quedó finalmente descartada en atención a los informes que desaconsejaban dicho extrañamiento
Puestos de acuerdo, los componentes de dicha Junta  dispusieron entre otras condiciones el que todos los que demostrasen estar legítimamente casados, poseer estatutos de castellanía o verificasen vivían arreglados en sus vecindarios, debían ser restituidos a sus lugares de origen con sus mujeres e hijos, siguiendo la regla de avecindar una familia cada cien vecinos. Si bien, en un artículo posterior, se determinaba el que los casados y los solteros que no concurrían en los requisitos del primer punto aun teniendo ejecutorias o declaraciones de castellanos viejos, debían aplicarse a obras públicas “con ración de presidiarios”, y en caso de fuga y sin más justificación, se les podía ahorcar “irremisiblemente”.
Más de la mitad de los cautivos serían puestos en libertad progresivamente hasta bien entrado el año de 1750. Los que quedaron debieron sufrir la privación de su libertad, muchos de ellos por los dieciséis años que hubo de transcurrir hasta que que no se hizo efectivo el indulto real que se anunció en 1763. Todos ellos sufrieron un doble desafuero, pues además de la prisión arbitraria acaecida con la Redada, se sumó el injusto proceso abierto para justificar su buen modo de vivir, y que diferentes autoridades de la época denunciaron.

domingo, 27 de agosto de 2017

LA REDADA DE GITANOS DEL 27 DE AGOSTO DE 1749 EN ALMERÍA

 A principios de julio de 1749, la redada diseñada para prender a un mismo tiempo todos los gitanos y gitanas de España para proceder a su expulsión (posteriormente se convertiría en un proyecto de exterminio biológico), ya se hallaba completamente diseñada. Si bien, en tan meticuloso plan se produjo un gran error: el olvido de numerosas poblaciones donde residían gitanos (toda Cataluña y poblaciones andaluzas como Cádiz, Málaga y Almería).
El 8 de julio de 1749, el marqués de la Ensenada envió las instrucciones que debían cumplir los tres intendentes de Marina, así como la relación de los lugares y destacamentos militares designados para desarrollar la operación a las doce de la noche del 30 de julio de 1749.
Realizada esta primera Redada, los gitanos almerienses, noticiosos de la prisión y del embargo de bienes que se había realizado en otras partes, tuvieron tiempo de huir, o al menos de desprenderse de sus pocas pertenencias. El corregidor de Almería, al no haber recibido la orden de prisión, sólo pudo dar aviso a Ensenada de cómo “los gitanos y gitanas de esta ciudad y su partido”, al tener conociendo lo que se había “ejecutado con los demás del interior del reino”, habían “vendido a ínfimos precios […] los pocos jumentos y otros animales que tenían”, por lo “que a ninguno podrá encontrársele bienes de algún valor”, temiendo que llegada la ocasión no se les hallaría “dineros ni otros bienes” para hacer frente a su mantenimiento, por lo que el municipio acabaría viéndose obligado a “costear los demás precisos gastos que se originaren”.

Segunda Orden de Prisión
Recibida la orden con casi tres semanas de retraso, el 23 de agosto, José de Diego y Heras, corregidor de Almería contestaba a Ensenada cómo había dispuesto las medidas necesarias para “la prisión, embargo y venta de bienes de todos los gitanos y gitanas que habitan en esta ciudad y lugares de su jurisdicción y partidos”, consistentes en el despacho de un “pliego cerrado para las justicias con la prevención de guardar sigilo hasta la noche del miércoles -27 de agosto-, en que siguiendo ya todas, sabedoras se ejecutasen las prisiones y demás diligencias a una misma hora”.

El secretismo con que se actuó fue tan efectivo que se logró “la prisión de todos sin excepción de alguno”. Separados los hombres y niños mayores de siete de años de las mujeres y niños menores de esa edad, fueron encaminados hacia la alcazaba de Almería, en donde se fueron concentrando el resto de las víctimas de las redadas efectuadas en los pueblos pertenecientes al corregimiento almeriense. Hasta el 30 de agosto, el recinto de la alcazaba albergó a:

“189 gitanos, hombres, niños y mujeres, los 79 aprisionados en esta ciudad, y los demás que se han conducido por los lugares de Alhabia, Terque, Sorbas, Santa Cruz, Alboloduy, Lubrín y Níjar; y faltando todavía los que había preso en los otros pueblos de esta comprensión”.

Patio de armas de la alcazaba. En primer plano, pozo de bajada a los calabozos

Aun el 6 de septiembre de 1749, los gitanos y gitanas aprehendidos se hallaban recluidos en la alcazaba, por lo que el corregidor debió dirigirse nuevamente a Ensenada a fin de que le comunicara “a donde remitir estos gitanos, el modo y forma, su conducción y el cuanto se consigna cada uno, regulados por familias o edad”. Finalmente, en 16 de ese mes, el ministro le contestó:

“que todos los que se hubiesen juntado y concurran ahí deben remitirse a Granada a disposición de su corregidor en la división que convenga y puedan asegurarse con la tropa de infantería y caballería de esa guarnición, costa y milicias que se pudiere destacar a este servicio, y cuyos comandantes manda el rey la franqueen en vista de esta orden”.

Autorizado el traslado, la Santa Hermandad se encargó de ello, librando el ayuntamiento de Almería los gastos correspondientes. Y de esta forma, los gitanos y las gitanas presos fueron instalados en la Alhambra junto a las demás víctimas capturadas en el reino granadino. Los hombres en la alcazaba y las mujeres con los niños pequeños en el patio de Carlos V. Desde allí pasarían a las atarazanas malagueñas, desde donde se enviarían los hombres y niños mayores de siete años al arsenal de La Carraca en Cádiz y posteriormente al de La Graña en El Ferrol, en cuyo trayecto perecerían muchos de ellos; en tanto las mujeres, debieron sufrir un largo periplo a través de diferentes lugares del casco urbano malagueño y de su alcazaba, hasta ser transportadas en barco en 1752 hasta Tortosa y ser recluidas en la casa de Misericordia de Zaragoza, donde se destacaron por sus continuas manifestaciones de rebeldía ante su injusta prisión.
La tragedia vivida por estos gitanos almerienses merece una reparación histórica a todos los niveles. En este sentido, el autor de estas líneas, con el apoyo de la Federación de Asociaciones Gitanas de Almería, tiene solicitado al ayuntamiento almeriense desde diciembre del pasado año, la imposición del nombre de Indalecio Santiago (en representación de las víctimas de la redada), a uno de los espacios públicos de la ciudad de Almería, sin que hasta el momento se haya resuelto cosa alguna sobre al respecto.

Artículo en prensa almeriense: http://www.gitanos.org/upload/50/85/cul_redada.PDF?utm_source=Gitanos%20en%20la%20Prensa&utm_medium=Bolet%EDn&utm_campaign=Gitanos%20en%20la%20Prensa.%20Agosto%202017&_uid=98874

martes, 1 de agosto de 2017

LA REDADA DE GITANOS DE REQUENA, CHELVA Y TUÉJAR. SU DESARROLLO DURANTE LOS PRIMEROS DÍAS DE AGOSTO DE 1749

La redada del 30 de julio de 1749 tuvo su continuación a lo largo de todo el resto del verano de ese año. Por la relación de las autoridades de Requena, podemos hacernos una idea aproximada de las diligencias practicadas tras la puesta en marcha de la operación de captura...
Convento de San Francisco, Requena

Para ver completa la publicación, pinchar en este enlace: http://adonay55.blogspot.com.es/2017/08/la-redada-de-gitanos-de-requena-chelva.html

La redada general de gitanos de 1749 en Segovia

LA REDADA GENERAL DE GITANOS DEL 30 DE JULIO DE 1749
La operación de captura en Segovia


Para realizar la redada en la ciudad de Segovia, Ensenada dispuso a Tomás de Usurum, capitán del regimiento de Infantería de Órdenes Militares, al frente de un piquete y de 30 hombres a caballo para auxiliar al corregidor segoviano...

Para ver el artículo completo: http://www.antrophistoria.com/2017/08/la-redada-general-de-gitanos-del-30-de.html

jueves, 27 de julio de 2017

REPARACIÓN HISTÓRICA: hoya salen del olvido las víctimas navarras de la redada de 1749

Relación de los gitanos y gitanas que se hallan presos en las cárceles reales de la capital del reino de Navarra.

María de Itúrbide, mujer de Miguel Antonio de Uroz, habitante en el lugar de Echalecu, Bervete y otros lugares.
María Francisca Camino, sobrina de la antecedente.
María Bautista de Arraiga, de edad de 28 años, mujer de Martín de Abadiano, preso así también en dichas reales cárceles, residente en los lugares de Leiza y Echalecu. Se halla presa con 3 criaturas de tierna edad y está encinta y próximo el parto según refiere.
María Ana Jiménez, mujer de Pedro de Echeverría, residente en el lugar de Obanos y otros de este reino. se halla presa en compañía de un niño de 10 años.
María Ana Trao, viuda residente en el lugar de Erdozaín. Se halla presa en compañía de su hijo llamado Francisco Echeverría.
María de Ezcurra, mujer de Juan de Urtazábal, según refiere, ignorando la residencia de su marido. Se halla presa en compañía de una hija de edad de 14 años llamada María Bautista de Urtazábal.
Josefa de Oses, hija de Diego Osses. Residente en la villa de Marsella por espacio de cinco años. Y anteriormente en la ciudad de Alfaro por ser natural de dicha ciudad.
Obanos
Echalecu










Los gitanos que se hallan presos, y de los que de algunos se lleva hecha relación anteriormente son los siguientes:
Diego de Osses, residente en la villa de Marcilla por espacio de 5 años y natural de la ciudad de Alfaro, de edad de 70 años.
Pedro de Echeverría, residente en el lugar de Abanto, de edad de 32 años.
Francisco de Echeverría, residente en el lugar de Erdozaín, de edad de 20 años.

Martín de Abadiano, residente en los valles de Imoz y Basaburica, de edad de 24 años.

MÁS INFORMACIÓN:
MARTÍNEZ MARTÍNEZ, Manuel. Los gitanos y las gitanas de España a mediados del siglo XVIII. El fracaso de un proyecto de "exterminio", Almería, 2014; p. 39.
MARTÍN, David. El Pueblo Gitano en Euskal-Herría, Tafalla, 2017; pp. 101-106.